En el mundo están ocurriendo cosas importantes que nos afectan directa e indirectamente a todos los países que forman «occidente». Estamos inmersos en la cumbre de la OTAN en la que el nuevo y autoproclamado Emperador de Occidente, Donald Trump, ha llegado como siempre, dando gritos, exigiendo y amenazando a todo bicho viviente, rodeado de toda su pompa y boato, con su abultada corte de aduladores temerosos de su ira y con el revolver Colt encima de la mesa para cualquier negociación. Es la muestra mas clara de su absolutismo monárquico. Sólo le falta que el Papa Leon XIV, un estadounidense de nacimiento, pero con acento hispano – peruano, le unja y corone solemnemente en la Catedral de San Patricio de Nueva York, como nuevo Emperador de la Tierra. O haga lo propio el Rabino principal de la Sinagoga Ema-el de Nueva York. Como aparenta ser religioso, aunque en realidad contraviene todos los mandatos divinos, le doy a elegir.
El ve el mundo como un gran mercado, a veces como un gran bazar turco, persa o árabe y como un mercadillo de navidad centroeuropeo. La cuestión es que piensa que todo en la vida es negocio, todo ha de comprarse y venderse, todo tiene un precio. Y cuando los negocios no le son favorables se enfada y amenaza, infunde terror, intimida y es un abusón. El cree que el mundo debe servirle a él y sólo a él, que para eso ya ha encargado la capa de armiño, la corona, el orbe y el cetro. No acepta que le lleven la contraria, no acepta un no por respuesta. El cree que su palabra es Ley y esa ley debe ser obedecida ciegamente.
En EEUU hay dos grandes Lobbies desde la primera Guerra Fría: las armas (Asociación Nacional El Rifle) y las finanzas (Lobby judío de Nueva York).
La Segunda Enmienda a su constitución de 1787 permite que los ciudadanos estén armados por si al rey inglés se le ocurre volver a invadir sus antiguas colonias, como si la guardia Nacional o los Marines actuales no pudieran repeler al ejército británico. Las armas han formado parte de la cultura estadounidense desde su fundación, primero para repeler a los británicos, después a los «nativos americanos» y después para combatir a los rebeldes tejanos y mexicanos.
Después surgió la «doctrina Monroe» que puso las bases del Partido Republicano actual y del concepto de Imperio Económico y comercial Estadounidense en las Américas. Surgen las «Repúblicas bananeras» originales. Como las guerras que libró desde su independencia le resultaron muy rentables para la industria armamentística, hizo de la fabricación de armas y todos sus componentes una industria próspera. Con los beneficios de las armas entró el negocio inmobiliario y de los transportes.
Los halcones del Partido Republicano no tuvieron pudor en impedir el desarrollo de una verdadera sociedad del Bienestar, regalando el país a la comunidad de muchimillonarios de los estados norteños y particularmente de las grandes fortunas de Nueva York, Boston, Chicago), que se dedicaron a engrandecer su entorno financiero y oligopolios (Grandes Corporaciones). Muchos de los cuales estaban gestionados por la comunidad judía estadounidense, la mas rica de todas.
El libre mercado se entendía en clave de libre albedrío y de libertinaje, lo que propició el nacimiento en el seno de las comunidades italoamericanas deprimidas económicamente el concepto de Maffia, que en versión estadounidense se denominaron «Ganster» (Pistoleros). Se libraron innumerables batallas campales por las grandes ciudades por la hegemonía territorial. Lucky Luciano o Alfonso Al Capone fueron sin duda dos grandes héroes para esta comunidad, daban trabajo, un salario y ayudaban a salir de la miseria a la gente; aunque con métodos criminales y delictivos.
El Lobby Judío de Nueva York se incrementó tras la segunda guerra mundial con la llegada de miles de judíos procedentes de los campos de exterminio alemanes y los gulag soviéticos, La mayoría de ellos participes de la ideología sionista. A cambio de apoyo para la causa sionista, es decir «retorno a Sión» (Israel), quitando de en medio a los Palestinos. Los judíos financiarían el gobierno federal y los estatales con sus muchos activos y el dinero que ganaron en Estados Unidos tras su llegada. Un gran negocio para Wall Street y para muchos presidentes republicanos que recibían de este lobby los fondos de campaña electoral. La compraventa de votos se convirtió en otro gran negocio para los inversores y especuladores inmobiliarios. Los vetos en el CSNU constantes, pese a la indignación internacional por esos irracionales vetos a favor de Israel. El negocio es siempre el negocio.
Esto ha pasado en las grandes capitales estadounidenses, pero en el Medio Oeste, en la zona desértica de Nuevo Mexico o Arizona, la población sufría la falta de servicios públicos esenciales y una permanente crisis sistémica. Allí surgió un movimiento favorable a la restauración de la antigua Confederación Americana, el Ku-klux-klan, el suprematismo blanco y organizaciones delictivas que funcionaban como la antigua mafia. Texas el estado mas conservador de Estados Unidos, amenazó con separarse de nuevo, porque de los 50 estados, Texas fue el único que había sido un estado independiente y soberano antes de su incorporación a la Unión.
Mexico y los estados fronterizos comenzaron a comerciar a ambos lados de la frontera y a ser laxos con las leyes estatales de migraciones. La costa oeste se volvió hispana y en la zona mas fronteriza surgieron voces que hablaban de una reunificación con México. Todo esto surgió por abandono del estado federal, la falta de bienestar, la sima entre ricos y pobres, etc… Consideraban que si EEUU les abandonaban, ellos se consideraban libres para definir su propio destino.
En Puerto Rico hubo voces de reunificación con España, si el Estado federal les abandonaba a su suerte. O incluso movimientos independentistas puertorriquenses comenzaron a surgir. Miami, la cuna del exilio cubano abogaba por una relación mas estrecha con su patria en aras de reunificarse con Cuba, permitiendo un nuevo régimen aduanero.
El Estado Federal con los Republicanos (los dos Bush) se ha basado principalmente en las armas y en las finanzas, todo lo demás se desprecia, olvida y abandona a su suerte. Confían tanto en la ley de la oferta y la demanda, que creen que cualquier persona puede superar la pobreza sistémica sin apoyo del estado. Para ellos el fin no justifica los medios. Todo aquello que se oponga a sus fines debe ser aniquilado o apartado.
En cambio con los del Partido Demócrata (Obama, Biden) suelen ser mas sociales y mas abiertos a reformas estructurales de gran envergadura. No abjuran de los negocios financieros ni de las armas (que solo las tenga el ejército), pero tampoco hacen nada por detener a los tiburones ni a la todopoderosa Asociación Nacional de El Rifle.
Trump prescinde de cualquier ideología, prescinde de consideraciones emocionales, prescinde de daños colaterales, prescinde del derecho en toda su extensión, especialmente aquella parte del derecho que le frena sus negocios. y le da absolutamente igual todo, él va a lo suyo, a hacer negocios y a llenar su propia cuenta bancaria.
Y como no quiere ser el malo de la película, se junta con otros villanos ilustres formando una banda de Gansters «ultras» que pretende acaparar la riqueza del planeta. Y como quiere aparentar que todo esto lo hace altruistamente y como persona generosa, se inventa sus batallas culturales, que en realidad están vacías de contenido, pero que sirve para contentar a la ciudadanía y no se revele contra él.
Un ejemplo de ello se ha visto en el seno de la OTAN, el bravucón de Trump exigiendo a los europeos que financien las armas que fabrican empresas estadounidenses en Estados Unidos, Armas que luego quiere que los europeos se las compre en exclusiva al precio que diga Trump. Es decir gran negocio para Estados Unidos, pésimo negocio para la UE. Todo dentro de su ideología «MAGA». Si la UE no obedece, Trump amenaza con retirarle la ayuda a la UE en caso de ataque hipotético de Rusia a Europa.
Dice Trump que la UE se creó para «joder» a Estados Unidos, mas bien creo es al revés. Porque quisiera recordarle a los estadunidenses, que en esto de la historia no son muy aplicados, que Estados Unidos existe gracias a la ayuda de Francia, España, Rusia, Mexico e incluso Gran Bretaña, países a los que ahora ataca Trump con sus absurdos aranceles. Agradecido, lo que se dice agradecido, no es el sr. Trump.
Le sobra arrogancia y le falta humildad. Y mucho mas conocimiento de la realidad multilateral.
Sr. TRUMP todas esas guerras que promueve usted y que financia «muere gente» y «les matan», se lo digo porque a lo mejor esta parte de la guerra no se la comentan sus asesores. Y por cierto no todos los países van a obedecerle, su jurisdicción acaba en la frontera de los Estados Unidos. Usted no es el presidente de la tierra. Usted es tan solo un jefe de estado más y debe ceñirse a las reglas multilaterales, que han funcionado muy bien y durante mucho tiempo para que venga usted a «joder» al mundo porque sus negocios particulares no estén saliendo como usted quiere que salgan.
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